Vivo siempre entre mi presente y esa situación proyectada que son mis sueños, mis deseos, cómo quiero ser o llegar a ser. La distancia entre las dos situaciones es demasiado grande. Por otro lado, una situación es real y otra, no existe. Sin duda, este deseo constante de superación me produce sufrimiento. La persona que anhelo ser dista mucho de la que soy en realidad. Y sobre todo ahora, que pararece que he perdido una de mis cualidades más destacables: la constancia y la voluntad.
Mi señorita del colegio Padre Poveda, la señorita Edurne, de 7º de EGB (por cierto, profesora muy significativa para mi, de la que guardo un gran recuerdo) ya decía en los años 80 que "la ciencia no es de los grandes talentos sino de las medianias constantes". Ya descubrí hace mucho que yo no era un gran talento, pero me daba fuerzas y confianza básica el saber que era constante. Pues ahora, ni eso.
Para aliviar esta sensación mala que tengo conmigo misma, me autojustifico diciéndome que estoy pasando un duelo y que ésto que me ocurre es normal.
Pero en el fondo sé que hay que salir de esta situación proactivamente
3 comentarios:
Buscando imágenes en la web, llegué a tu blog. Me deslumbró la llama de esa vela que luce tu cabecera, y una vez en él, no pude dejar de leerlo. Me impactó la reflexión que cuentas sobre lo que decía tu señorita. Es increíblemente sabia, aunque a veces no lo veamos así.
No veas como una justificación, algo que es real. Somos humanos, y eso nos hace vulnerables, además de imperfectos. La vida, al igual que nuestros días, tiene repartidos momentos de luz y de oscuridad. Los de luz, ya se sabe, son para disfrutarlos, y los otros, inevitablemente, se han hecho para saber esperar la nueva luz y valorarla cuando la tenemos. Ánimo! que todo pasa! te dejo un cálido beso desde mi sur fueguino.
¡Qué sorpresa, Lúa!. Llevaba varios días sin entrar en el blog y veo tu comentario. Me ha encantado tener respuesta de alguien. Como habrás visto, casi siempre figura: 0 comentarios. Muchas gracias por tu visita y por tus profundas reflexiones, que comparto.
Qué bueno que entraste entonces querida amiga! Estuve volviendo algunas veces a ver si había noticias tuyas, y afortunadamente las hay!
Me alegra enormemente ser bien recibida en tu casa, así que ya me tienes de lectora fija, jajajajaja. Nos vemos en tu siguiente entrada!
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